“Esto dice el SEÑOR Soberano: ‘¡Atención! ¡Pondré aliento dentro de ustedes y haré que vuelvan a vivir!” Ezequiel 37:5
Dios es Creador, pero también es la fuente de vida que da propósito y aliento a todo lo que existe.
Dios lo creó a usted, y al crearlo, sopló aliento de vida para que su cuerpo (material) tuviera movimiento y sentimientos.
Sin embargo, durante el transcurso de su vida, usted sentirá que muere muchas veces. Sentirá que muere cuando sucede lo inesperado o cuando enfrenta una desgracia.
Sentirá lo mismo cuando un hijo se va de casa o cuando percibe que su matrimonio se deshace como un muro hecho de barro.
Entonces, una y otra vez, usted necesitará que Dios vuelva a infundir aliento en su corazón. Aliento para amar, aliento para esperar, aliento para vivir.
Amado lector, si usted necesita aliento hoy, le aseguro que lo tendrá si lo pide. Pero recuerde, debe reconocer primero que lo necesita.
No todo está perdido; quizá usted siente que su espíritu está agonizando, pero Dios hoy le dice: “volverás a respirar, volverás a sentirte vivo”.
La vida, en resumidas cuentas, termina siendo una lucha por “respirar”. Las situaciones intentarán asfixiarlo, los problemas buscarán privarlo del oxígeno divino, pero usted debe confiar en Dios; Él no lo dejará morir.
Amado cristiano, el oxígeno le podrá faltar; usted podrá sentir que muere de dolor en su interior, pero puede estar seguro de algo: Dios le dará vida otra vez.
Aliento es la promesa. Entonces pida aliento. Con el aliento de Dios, usted podrá hacer todo lo demás. Aliento es lo que usted necesita. Si usted no sabe cómo empezar el día, mi consejo es: pida aliento.
Pida aliento para seguir a Jesús. Aliento para amar y cuidar a su familia. Aliento para enfrentar sus desafíos económicos. Aliento para ser fiel a las proyecciones de su empleo o empresa.
Vuelva a vivir. Dios es extremadamente poderoso como para darles vida a un montón de huesos secos. Su valle de huesos secos se convertirá en un festín de alegría y celebración. Tenga esperanza, usted volverá a celebrar.
Feliz y bendecido día.